Pasarán los años, y volveré a verme en esas pupilas en las cuales algún momento hace años atrás me vi. Me veré y volveré a creer que el tiempo no ha pasado para nadie y que podemos volver a reírnos de los viejos chistes que nos hacían llorar de tanto reír, conversaremos de las cosas sobre las cuales hemos gastado nuestros tiempos, y pensaremos que las horas son sólo una ilusión, un velo sobre el cual las apariencias cambian, que todo lo externo fluye, pero que en escencia seguimos iguales; yo sigo idéntico cada vez que me miro en tus ojos cuando respiras mientras duermes en la cama con tu piel tibia, mientras procuro no despertarte, aunque quiera moverme y revolcarme porque no aguanto las cobijas, entonces me doy cuenta de que el tiempo pasa tan rápido y sin que uno se de cuenta mis ojos se nublan, les cubre una tela que ya no me deja ver bien, que lo que creía imperecedero efectivamente se marchita, y muere, y de tanto mirar, ya no volví a encontrarme en tus pupilas nunca más.
miércoles, 30 de enero de 2008
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1 comentario:
me gusta la manera cómo logras llegar a los sentimientos más profundos y compartir parte de tí en tus palabras.
adiós
marina... fue un gusto encontrar tu blog
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